Nuevamente gracias al diario El Ciudadano, sabemos que en 1965 IMFASA presentó la quiebra y fue rematada por el Juzgado Nacional en lo Civil y Comercial Nro. 3 de la ciudad de Buenos Aires, en el marco de la causa “Banco Industrial de la República Argentina contra IMFASA s/ ejecución hipotecaria”. El mismo diario detalla versiones sobre en manos de quien quedó, lo cual es poco significativo, porque el edificio permaneció en un abandono total, al menos hasta 1989.
En este año ingresa a nuestra historia el tercer personaje, Néstor Corsi, alias “Profeta Kropp”, a través de su esposa, Nilda Aquino Arzamendia, que adquiere el inmueble en 1989. Nuestro profeta (ya veremos el porqué del apodo) y su esposa, planearon montar en la fábrica un salón de automóviles clásicos, bajo “Napoleón Sociedad Anónima” (Ya disuelta, actualmente el mismo nombre lo usufructúa un local de ropa de Las Heras, Mendoza). El nombre de la sociedad pintaba de cuerpo completo la personalidad de Néstor Corsi, y permitía intuir el futuro del proyecto: Corsi es un megalómano de manual, y el proyecto una ambición sin sentido comercial alguno.
A pesar de ello, algunos automóviles de colección fueron guardados en la fábrica abandonada, y el edificio fue levemente modificado. Su forma actual de castillo es debido a la incorporación de almenas (salientes verticales y regulares), en la chimenea y los techos del edificio, incorporados en esta época para que llamar la atención, el único de los objetivos planteados por Corsi que fue logrado por demás.
El proyecto nunca fue terminado, el matrimonio se disolvió, y Corsi se radicó en Córdoba, donde es más conocido como el “Profeta Kropp”, donde se dedicó a promover una cura contra el cáncer de características milagrosas, y fue preso por estafa. Este suceso fue ampliamente difundido por la prensa cordobesa, y bien vale la pena dedicarle un post particular. No obstante, es digno rescatar la obsesión de este hombre para con los castillos medievales, para lo que basta ver el “Pozo de Luz” (ver imagen), la construcción de piedra que realizó en San Marcos Sierras (foto del post), y segundo castillo construido por el fallido Rey de la nada.
Respecto al Castillo Cañuelense, desde entonces fue alquilado para diversos usos, desde una bailanta, hasta un tenedor libre libre. En las fotos aún puede verse el edificio pintado anunciando los $3,50 que había que pagar para comer todo lo que uno pudiera.
Nilda Aquino es actualmente propietaria, y aparentemente no abona hace años el impuesto inmobiliario, ya que la agencia de recaudación bonaerense (ARBA), la reporta como contribuyente en estado judicial. En 2005, sufrió un nuevo pedido de remate, pero aparentemente no hubo compradores. Por último, en 2015 ingresó en la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires, un proyecto para la expropiación del edificio a los fines de emplazar en el terreno una universidad, pero considerando el estado actual del lugar, no tuvo el éxito esperado.
V) Nuestra visita
Visitamos el lugar el 29 de diciembre de 2018. En primera persona, el tamaño del edificio es imponente, y para poder fotografiarlo completo, hay que alejarse muchísimos metros. El estado actual no difiere del abandono relatado. La ropa colgada sobre una soga que pende de las estructuras más bajas, las dos antenas de televisión satelital y una persona que miraba desde el interior de una de las dependencias, nos hacen saber que hay gente viviendo en la instalación.
Debido a lo antiguo del edificio, probablemente no cumpla con los estándares industriales actuales, y su recuperación costaría aún más que un establecimiento moderno hecho de cero. Por ello, nuestro viejo y deteriorado Castillo probablemente nunca sea más que eso, hasta que algún día se encuentre una utilidad mayor al terreno donde está emplazado, y éste sea demolido, para dar paso a algo nuevo.
Gracias a los algoritmos de Youtube, me tope con URBEX JAHMAN, un explorador de lugares abandonados, quién accedió al Castillo por dentro a principios de 2020. Es recomendable su canal, y todos sus vídeos. A continuación, el link a esta visita:
Gracias a los algoritmos de Youtube, me tope con URBEX JAHMAN, un explorador de lugares abandonados, quién accedió al Castillo por dentro a principios de 2020. Es recomendable su canal, y todos sus vídeos. A continuación, el link a esta visita:
De esta forma finaliza esta interesante y algo triste historia, de cómo un establecimiento industrial pionero pasó a ser un edificio abandonado símbolo de la marginalidad y de lo bizarro, y con ello un fiel reflejo de una gran parte de nuestra historia nacional… y todo esto pasó a tan solo 70 km del obelisco.
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